Divertido proyecto para hacer en casa: velas mágicas de huevos de dragón
¿A quién no le encantan los huevos de Pascua rellenos de regalitos? ¿O un huevo Kinder Sorpresa? ¿Qué tal esos globos que traen cosas dentro? ¡Es muy difícil resistirse a un huevo de chocolate con un juguete en su interior! Ahora ya puedes hacer tu propio huevo sorpresa, pero en lugar de un juguete, descubrirás una vela con un dragón. Esta es definitivamente la versión adulta de tu golosina favorita de la niñez. Te encantará ver cómo el dragón rompe el cascarón mientras las velas hechas a mano se consumen y el bebé dragón surge desde el interior.
Vas a necesitar:
- Velas viejas
- Un huevo de Pascua de plástico
- Colores de cera de tu preferencia
- Pabilo para vela con alfiler para mecha
- Figura de cerámica con forma de dragón
- Spray de color resistente al fuego
Se hace así:
1. Primero, vas a necesitar suficiente cera líquida para rellenar el huevo de plástico. Si no quieres usar velas nuevas, solo tienes que derretir algunas viejas que ya no necesites. Lo mejor es colocar las velas en un soporte o en un recipiente resistente al calor. Después, colócalo dentro de una sartén hasta que la cera se derrita.
2. Vierte la cera líquida en una olla y agrega unos cuantos lápices de cera (¡retírales las etiquetas primero!). Calienta la olla y revuelve el contenido con una cuchara de madera. La cera se teñirá del color de los crayones.
3. Con el taladro, haz una perforación en el centro de la mitad superior del huevo
4. Tip: Vierte la cera líquida en una jarra para que sea más fácil transferirla al huevo.
Coloca el pabilo de la vela en el fondo del huevo. Para mantenerlo estable, primero sumerge el alfiler con la base en la cera y enrolla el pabilo alrededor de un boli.
5. Ahora vacía la cera dentro de la mitad inferior del huevo y deja que se endurezca.
6. Después pon el dragón de cerámica sobre la cera endurecida y enrolla el pabilo alrededor de la figura y atraviésalo por la perforación de la mitad superior del huevo. Cierra ambas partes del huevo.
7. Con la ayuda de un embudo pequeño, rellena el huevo sellado con cera líquida. Nuevamente, espera a que la cera se endurezca.
8. Retira la cáscara de plástico (puedes guardarla para hacer huevos más tarde). Talla escamas en la superficie de la pieza, de manera que parezca un huevo de dragón.
9. Finalmente, rocía el huevo de cera con la pintura en aerosol resistente al fuego.
Ahora, cuando enciendas la vela, empezará a aparecer un bebé dragón mientras la vela se derrite con el calor.
Tener un pequeño dragón como mascota es, quizás, la fantasía de muchos niños, y con este divertido y curioso proyecto, estarás a un paso de hacer realidad tu sueño. Si te sientes inspirado y quieres continuar haciendo manualidades con dragones de fantasía, te recomendamos también los huevos dorados de dragón.