Congela alimentos al vacío. ¡Adiós, alimentos quemados!
Es el pan de cada día: haces cena para uno y te sale para tres. No es un problema en estos tiempos en los que tenemos congeladores. La cena de hoy estará riquísima dentro de tres meses. Pero a veces ese solomillo, otrora delicioso y con una pinta fantástica, sale del congelador negro tras quemarse en el congelador. Hoy te presentamos una forma de acabar con este problema.
Estas quemaduras no estropean los alimentos, pero cambian su sabor y consistencia. Esto suele ocurrir cuando no se sellan al vacío. Si quieres proteger tus alimentos, hazte con un recipiente grande y llénalo de agua (no tiene que ser tan grande como el de las fotos de abajo). A continuación, coloca los alimentos que quieras congelar en bolsas individuales para congelar y ciérralas dejando abiertos apenas unos centímetros.
Sumerge cada bolsa poco a poco dentro del agua. La presión de esta sacará el aire de la bolsa. Asegúrate de que no entre el agua por la abertura.
A continuación, cierra esos centímetros finales. Recuerda secar el exterior de la bolsa antes de colocarla en el congelador. Esto impedirá que se forme hielo innecesario dentro de tu congelador.
Este método es mejor que el de cualquier máquina para sellar ¡y estarás ahorrando un montón de espacio en la cocina!
Aquí tienes los pasos en vídeo (en inglés):
Y tú estabas pensando comprarte una cara máquina selladora. ¡Prueba a abrir el grifo del agua en su lugar! ¡Tus productos congelados lucirán y sabrán fantásticos para siempre jamás!