Toma nota de este truco para que nadie vea a través de tus ventanas
Cuando una ventana está expuesta a miradas extrañas, debería ser bonita y, al mismo tiempo, obstruir la vista; pero no impedir que entre la luz del sol. Este truco es tan sencillo que puedes hacerlo tú mismo. Es una decoración tan bonita y práctica, además de fácil de quitar; es ideal para casas en alquiler.
Necesitas:
- 2 cucharadas soperas de harina de maíz.
- 2 cucharadas soperas de agua fría.
- 1 taza y media de agua hirviendo.
- Suficiente encaje para el área de la ventana que quieras cubrir.
Y así es como se hace:
Paso 1:
Haz la pasta. Primero mezcla la harina de maíz con el agua fría. Mezcla bien y vierte el agua hirviendo encima. Vuelve a mezclar para conseguir una pasta consistente y déjala enfriar.
Paso 2.
Corta el encaje. Corta el encaje con el mismo tamaño y forma de la parte de la ventana que quieres cubrir.
Paso 3:
Con una brocha ancha pega la harina de maíz a la ventana. Crea una capa uniforme y, a continuación, coloca el encaje sobre la pasta. Finalmente, coloca una capa más gruesa de pasta sobre el encaje con la brocha y déjala secar.
El resultado es simplemente precioso y ningún mirón verá nada a través del encaje.
Y la luz del sol seguirá entrando en tu habitación. Ya podrás disfrutar del solecito en paz...
Si algún día te mudas de tu apartamento o si simplemente quieres que tu ventana luzca diferente, el encaje puede retirarse fácilmente con agua caliente. Retira el resto de la harina de maíz con agua muy caliente (¡ponte guantes!) y una esponja.
Un truco genial que no es solo práctico, sino también bonito! Comparte esta idea con todos tus conocidos y ¡haz que los mirones de la planta baja reciban la indirecta!