10 problemas con los que todos los veterinarios tienen que lidiar
Ser veterinario es el sueño de muchos niños. Todos los días acariciando gatos y perros, mientras protegen su salud. Desafortunadamente, la realidad es diferente, porque los dueños de mascotas a menudo les causan muchos problemas por descuido o falta de información. Es el veterinario quien se ve obligado a lidiar con ellos día tras día. Estos son 10 errores comunes de los dueños de mascotas y que debes evitar de hoy en adelante.
1. El propietario no conoce la historia clínica de su mascota
A diferencia de los humanos, los pacientes de cuatro patas no pueden hablar con su médico. Por lo tanto, corresponde al propietario informar al veterinario de la historia clínica de su mascota y responder con honestidad a sus preguntas, para que el animal pueda recibir la ayuda más adecuada. Si la información es incorrecta o incompleta, puede tener un efecto negativo en la mascota. Por lo tanto, debes evitar este error en cualquier caso.
2. El dueño está convencido de que los pitbulls son los perros más agresivos
Los pitbulls y rottweilers son las razas de perros más peligrosas que existen. Esta es al menos una afirmación que los veterinarios escuchan casi todos los días. Pero son los perros pequeños y discretos, como los chihuahuas, los que a veces se muestran agresivos y volubles. Gruñen y muerden al médico durante el tratamiento con mucha más frecuencia que los conocidos "perros de pelea".
3. El propietario lleva a su mascota al veterinario debido a problemas de comportamiento
¿Su mascota rechaza a su recién nacido o va repartiendo heces por toda la casa? Entonces este no es un caso para su veterinario, sino para un psicólogo de animales. Porque mientras que los veterinarios se especializan en curar lesiones y enfermedades, los psicólogos de animales están entrenados para tratar los trastornos del comportamiento de los animales. En este caso puedes ahorrarte el viaje y la consulta al veterinario.
4. El dueño le da preparados vitamínicos a su mascota
Una dieta equilibrada proporciona todas las vitaminas y minerales necesarios para tu mascota. Por lo tanto, los suplementos vitamínicos no son necesarios por lo general. Sin embargo, si tú mismo le preparas la comida a tu animal de compañía, es aconsejable consultar con el veterinario qué vitaminas y minerales adicionales son necesarios y en qué dosis.
5. El dueño le da a su mascota carne cruda
Muchos dueños de mascotas asumen que los perros y gatos pueden alimentarse con carne cruda, como si fueran animales salvajes. Sin embargo, la anatomía de los perros y gatos no está diseñada para consumir alimentos crudos. Si cambias repentinamente la dieta de tu mascota de alimento seco a carne cruda, corres el riesgo de causarle graves problemas digestivos y deficiencias nutricionales.
6. El dueño administra medicamentos para humanos a su mascota
En principio, la medicación debe mantenerse fuera del alcance de la mascota para que no la consuma sin querer. Los analgésicos, por ejemplo, tienen un efecto tóxico en los animales y pueden provocar la muerte en el peor de los casos. Sin embargo, los medicamentos contra el cáncer y los antidepresivos solo se administran en casos excepcionales y por indicación del veterinario.
7. El dueño usa correa extensible para pasear al perro
Los dueños de mascotas usan este tipo de correas para que sus perros paseen con más libertad. Esto no solo permite al perro explorar el mundo, sino también moverse más cómodamente. Sin embargo, este tipo de correa puede dañar a largo plazo la columna vertebral de los cuadrúpedos, ya que acortar la correa de un jalón puede lesionar el lomo de los perros. Por lo tanto, es aconsejable recurrir a otros tipos de correas, más tradicionales si es preciso.
8. El dueño busca en Google los síntomas de su perro
Si tu mascota se siente mal de repente, no es una buena idea buscar en Google los síntomas. Aunque la búsqueda en Google a veces puede ser muy útil, en la mayoría de los casos suele arrojar resultados aterradores. Si realmente hay algo grave tras los síntomas de tu mascota, es importante actuar rápidamente. Por lo tanto, es mejor visitar al veterinario con cierta frecuencia que cuando ya es demasiado tarde.
9. El dueño se niega a aceptar la eutanasia como una opción correcta
Aceptar la eutanasia de tu mascota debido a una enfermedad incurable es difícil, pero en muchos casos es la única opción viable. Es comprensible que los dueños prefieran probar otros tratamientos y que, por lo tanto, permitan inconscientemente que su mascota sufra más tiempo. A veces, dejar ir al amado amigo de cuatro patas es la única posibilidad correcta para liberarlo de su dolor.
10. El dueño de una mascota no valora el trabajo del veterinario
Un veterinario no solo se ocupa de las enfermedades y lesiones de tu mascota, sino que también le presta atención y cariño durante el tratamiento. Los veterinarios recuerdan a cada paciente y sufren en silencio cuando llega el día de la despedida. Para muchos de ellos, ser veterinario no es solo una profesión, sino una pasión. Por lo tanto, estos médicos deben ser tratados con respeto y aprecio. Desafortunadamente no siempre es así.
Ser veterinario no es tan fácil como podrías haber imaginado de niño. Pero ahora que sabes cuáles de tus errores podrían dificultarles el trabajo a los veterinarios, puedes evitarlos en el futuro y colaborar con tu veterinario por el bien de tu querida mascota.