Top 10: los inquilinos más temidos debido a su profesión
Nadie puede obligar a un propietario a aceptar a un inquilino en particular. Las familias monoparentales, los inmigrantes y los desempleados que buscan alojamiento son los más rechazados por los dueños de las viviendas, ya que tanto los propietarios como los agentes inmobiliarios dudan de que el alquiler se pague puntualmente.
Sin embargo, varias encuestas realizadas por institutos de investigación de opinión pública muestran que no es solo la solvencia económica lo que determina si se otorga un contrato de alquiler. A continuación veremos qué tipos de profesionales son las más temidos como inquilinos entre los propietarios y los agentes de bienes raíces.
10.º lugar: Médicos
Casi ningún otro grupo profesional goza de una reputación tan buena como la de los médicos. Algunos propietarios, sin embargo, ven las horas irregulares de trabajo como parte de una vida inestable.
9.º lugar: Banqueros
Me pregunto si es por las malas experiencias. ¿O existe el temor de que los banqueros cambien a menudo su lugar de residencia? En cualquier caso, los propietarios de apartamentos y los agentes inmobiliarios votaron a los banqueros en el 9.º lugar entre los inquilinos más impopulares.
8.º lugar: Policías
Con un guardián de la Ley demasiado cerca, algunos propietarios temen meterse en problemas. Otros quieren evitar disputas por infracciones administrativas entre los inquilinos.
7.º lugar: Maestros
Los profesores tienen la reputación de sentirse sabelotodo. Además, están mucho en casa, lo cual es potencialmente más problemático. Así que algunos propietarios prefieren prescindir del salario de un profesor y ahorrarse todas las quejas sobre ruidos molestos y vecinos que no tiran la basura correctamente.
6.º lugar: Estudiantes
El hecho de que los estudiantes no estén entre los inquilinos más solicitados no debería sorprender a nadie: se les atribuyen bajos salarios, cambios frecuentes de residencia y fiestas excesivas. Sin embargo, los estudiantes solo están en el sexto lugar de la lista.
5.º lugar: Abogados
Un sudor frío es lo primero que sienten muchos caseros cuando un abogado o un juez solicitan su apartamento en alquiler. Nadie sabe mejor demandar al propietario para obtener una reducción del alquiler.
4.º lugar: Actores
Lamentablemente, muchos actores no solo tienen que luchar contra el estereotipo de ganar un ingreso bajo o irregular, sino enfrentarse muchas veces a esa amarga realidad, lo que les dificulta encontrar un apartamento.
3.er lugar: Músicos
Mientras practican con su instrumento, provocan a los vecinos ataques de nervios. No importa lo talentoso que seas, con tener a un solo miembro de la Orquesta Sinfónica Nacional como vecino es suficiente para volverse loco.
2.º lugar: Personal de limpieza
El personal de limpieza es necesario y relevante en la vida pública y privada. Algunas personas no se dieron cuenta de esto hasta que llegó crisis de la coronavirus. Sin embargo, sus bajos salarios no los hacen muy atractivos para los propietarios y agentes inmobiliarios.
1. er lugar: Cuidador/a de niños
Cualquiera que, por decirlo de alguna manera, haya elegido como profesión ser cuidador de niños, debería empezar a buscar un apartamento lo antes posible. Porque a la mayoría de los caseros les empieza a latir más rápido el corazón en cuanto una de estas personas les solicita su propiedad en alquiler. Son el número 1 en la lista de los inquilinos más impopulares.
Por otro lado, en la cima de la escala de popularidad están los funcionarios (excepto los profesores, policías y abogados) y los pensionistas: se les considera fiables y tranquilos. Pero los que hacen trabajos manuales, como los pintores o carpinteros, también están muy solicitados por los propietarios y los agentes inmobiliarios, quizás porque tienen la esperanza de que ellos mismos se hagan cargo de las reparaciones del inmueble.
Sin embargo, no debes mentir en tu formulario de aplicación. Después de todo, la cuestión de la profesión del futuro inquilino es uno de los intereses legítimos del dueño de una casa o apartamento. Quienquiera que haga declaraciones falsas puede meterse en problemas y tener que dejar el inmueble de forma repentina.
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