15 errores que casi todos cometemos al amueblar y decorar la casa

Cuando se trata de amueblar y decorar la casa, en gustos se rompen géneros. Lo que a una persona le parece simple y elegante, a otra le puede resultar muy aburrido. Lo que pasa dentro de nuestras cuatro paredes debería importarnos mucho, ya que es nuestro espacio íntimo, el lugar donde nos sentimos totalmente relajados. Pero a pesar de que no existen reglas absolutas sobre el diseño interior de nuestro hogar, hay algunos errores en los que casi todos incurrimos. La mayoría de las veces, ni siquiera nos damos cuenta de que podríamos mejorar el aspecto de nuestra casa hasta que alguien más nos lo señala. Por esta razón, hemos hecho una lista con las 15 metidas de pata más comunes a la hora de decorar nuestro espacio vital. Cosas que debes evitar para disfrutar más aun de tu nido... 

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1. La iluminación

Una sola lámpara colgando del techo puede proveerte la luz suficiente, pero lo más probable es que no cree un ambiente cálido. En cambio, puedes colocar algunas lámparas de pie o de mesa para generar una atmósfera más íntima y usar la lámpara de techo solo cuando realmente la necesites.

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2. Jabón y detergente para platos

Actualmente, la gente pone un énfasis especial en los objetos del cuarto de baño y de la cocina. Por esta razón, es una pena que estos lugares estén llenos de botes de plástico llenos de jabón, que parecen unos verdaderos adefesios.

En lugar de dejar esos botes de plástico sobre la barra de la cocina, compra algunos dispensadores de cerámica que combinen con el resto de la decoración. También puedes agregar un toque muy lindo con paños para limpiar y trapos de cocina que vayan bien con los colores de la cocina.

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3. Estanterías abarrotadas

Una colección de libros puede agregar un ambiente especial a un salón. Pero cuando están apilados por todos lados, casi a punto de caerse de los estantes, el efecto estético se pierde rápidamente. Si tienes una colección de libros que quieres mostrar, asegúrate de tener un buen armario o vitrina para mantener todo en orden. 

La otra opción consiste, simplemente, en deshacerte de los libros. Si no te interesa tener una librería privada, ¿por qué no darle esos viejos libros a alguien que en verdad los lea, en lugar de dejarlos a merced del polvo y las telarañas? Te dejarán espacio libre para otras cosas.

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4. Las paredes de color

Las paredes blancas son muy comunes en apartamentos y casas alquiladas. Por lo general, los propietarios hacen el esfuerzo de agregar algo de color en su espacio vital, pero para los que alquilan una vivienda no resulta muy atractivo, lo que en algunos casos es un gran error. Tomarse el tiempo y hacer el esfuerzo de pintar tus paredes, y con ello imprimirle cierta "personalidad" a la casa, puede tener un gran efecto en cuanto al placer que experimentas al llegar a tu hogar. Esto es especialmente importante en regiones donde los inviernos son largos y oscuros. De hecho, un color cálido y acogedor puede mejorar tu estado de ánimo. 

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5. Falta de estructura

Debido a que el diseño de las casa tiende a ser más abierto, las habitaciones individuales como los salones, los comedores o los despachos se están convirtiendo en cosa del pasado. Los espacios abiertos pueden ser muy bonitos, pero puede dar lugar a una falta de estructura a la hora de amueblar el espacio. 

En este caso, se recomienda crear zonas con muebles y decoración que combinen entre sí. Los separadores de habitaciones pueden ayudar a diferenciar las atmósferas de cada área. Unos tapetes muy bien colocados y unas lámparas de piso también pueden contribuir a definir cada uno de los espacios.

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6. Falta de proporción

Una habitación puede parecer desproporcionada si la cantidad de muebles no se adapta a las dimensiones. Una habitación demasiado grande con muy pocos muebles puede parecer medio vacía, mientras que un espacio pequeño con una mesa enorme puede resultar claustrofóbica. Trata de amueblar las habitaciones de manera que la gente pueda caminar libremente por ella sin tener que recorrer 20 metros hasta llegar al próximo sillón. 

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7. Demasiados estilos

Incluso las habitaciones muy bien ordenadas pueden parecer saturadas cuando hay demasiados estilos y colores que llaman la atención. Trata de elegir un estilo y un color dominante por habitación y agregar objetos que los complementan sutilmente.

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8. La copia del aparador

Para evitar estilos contradictorios, algunas personas imitan lo que ven en los aparadores de las mueblerías y en los catálogos. Puede que parezca una buena idea, pero si no aplicas tu propia criterio y no dejas brillar tu personalidad a la hora de elegir la decoración, podrías terminar con una gran sensación de insatisfacción.

No necesitas decorar tu casa en una sola noche. Si te tomas tu tiempo y vas agregando cosas poco a poco, comprando una pieza a la vez, te darás cuenta de que el resultado es mucho más interesante y placentero. 

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9. Tus necesidades

La decoración de tu casa no solo debe reflejar tu estilo y personalidad, sino también tus necesidades. Si recibes invitados muy de vez en cuando y, por lo general, comes en la pequeña mesa de la cocina, probablemente no necesites una gran mesa de comedor. ¿Y de verdad quieres unos sillones blancos cuando a tus dos hijos pequeños les encanta hacer experimentos con crayones, pinturas y otras sustancias "promanchas"?

Antes de agregar algo nuevo a la decoración de tu hogar, siéntate y pregúntate por qué quieres ese objeto y si realmente lo necesitas.

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10. En las paredes

Es algo muy común, pero no existe ninguna regla que diga que tiene que ser así. Normalmente, colocamos los muebles contra las paredes para dejar mucho espacio en medio de la habitación. Está bien tener espacio para desplazarse, pero poner un sofá o una estantería baja para separar un "rincón" en la habitación puede mejorar la atmósfera del espacio. 

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11. Objetos decorativos

Puede parecer algo insignificante, pero colocar ornamentos como floreros y macetas agrupados puede hacer una gran diferencia. Haz la prueba: pon tres objetos juntos de la misma categoría. Ahora inténtalo con dos. ¿Cuál se ve mejor según tu opinión?

12. Cuadros y fotos

Los cuadros no deben colgarse solos en un pared grande. Colócalos en grupos pequeños, especialmente si son pequeños, y tendrán un efecto mucho más bonito. Acomodar las fotos en estanterías, vitrinas o mesitas auxiliares también puede crear conjuntos con estilo. 

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13. Dormitorio

Elegir el dormitorio más grande de  la casa o apartamento suena como lo más obvio, pero es mejor que te lo pienses dos veces. Después de todo, la mayoría de nosotros solo tiene una cama, un clóset y un par de mesitas de noche, y cuando estamos ahí es casi siempre para dormir.

Si usas la habitación de invitados como tu dormitorio, podrás disfrutar de otra habitación más grande para otras cosas. 

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14. Recibidor

Le ponemos una gran atención al salón porque es un lugar donde pasamos la mayor parte del tiempo y por ser el lugar donde convivimos con los invitados. Pero el recibidor o pasillo de la entrada también merece algo de atención.

En lugar de usar este lugar como depósito de nuestras chaquetas y zapatos, deberíamos asegurarnos de que la entrada principal esté bien organizada y tenga un buen perchero y muchos ganchos para los abrigos, así como tapetes para mantener en orden los zapatos. Recuerda: este es el primer lugar de la casa que la gente mira cuando te visita, ¡así que trata de dar una buena impresión!

15. Pequeños arreglos

Es fácil pasar al lado de estas pequeñas molestias. Al final, terminamos por acostumbrarnos y dejamos de percibirlas. Un rayón aquí, un rasguño allá, un interruptor roto, una manija suelta. Posponer estas pequeñas reparaciones domésticas suele provocarnos problemas mayores, y una vez que se acumulan pueden parecernos una tarea imposible. Por esta razón, es importante ocuparnos de los pequeños arreglos lo más pronto posible. Estarás feliz de haberlos hecho.

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Finalmente, es tu casa y tú decides cómo quieres que se vea. En realidad, no se trata de errores imperdonables, sino de recomendaciones que puedes tomar en cuenta en caso de que no estés completamente satisfecho con la decoración de tu casa. Con un poco de esfuerzo e imaginación, puedes transformar tu hogar en un espacio que te provoque una sonrisa nada más atravesar la puerta.