Tips para comportarnos en la playa o en la piscina exterior como debe ser
¡Hurra, por fin ha llegado el verano! Para la mayoría de la gente, esto significa empacar la toalla y salir al lago, a la playa o a la piscina al aire libre.
Pero mucha gente no piensa en el hecho de que algo puede salir mal. Dependen de los salvavidas o sobreestiman sus propias habilidades. El ahogamiento es la tercera causa más común de muerte en el mundo. Cada año mueren alrededor de 360.000 personas en accidentes en el agua. Los niños y los jóvenes constituyen los mayores grupos de riesgo.
Pero no solo en el mar o en el lago, también en la piscina hay cosas a las que debemos prestar atención para pasar un día relajado y, sobre todo, seguro en el agua. Los siguientes 15 consejos del salvavidas te ayudarán a nadar sin correr riesgos innecesarios.
1. Ahogarse no es como en las películas
Ahogarse no es como lo vemos en las películas. Porque en realidad suele ocurrir sin ruidos y sin mover los brazos. No importa cuán profunda sea el agua en la que se encuentre la persona que se está ahogando.
Por lo tanto, siempre presta atención a las personas o niños cerca de ti que tienen la cabeza justo encima del agua y cuyas bocas se meten bajo el agua una y otra vez. Incluso las personas que parecen estar mirando al cielo con la boca abierta pueden estar en apuros. Habla con ellos tranquilamente. Si no obtienes respuesta, sabes que necesitan tu ayuda.
En ese caso, informa al salvavidas inmediatamente y no te pongas en peligro innecesariamente. Para el socorrista es peor si de repente tiene que salvar a dos personas.
2. Si el salvavidas te dice que no corras, debes hacerle caso
Por lo general, son los niños a los que les gusta romper las reglas y hacer cosas que se supone que no deben. Pero también hay adultos que no siguen todas las indicaciones. Por favor, respeta las normas de la piscina, en la playa o junto al mar. No se crearon sin razón. Correr descalzo sobre una superficie resbaladiza ya ha causado muchas caídas dolorosas.
3. No tengas conversaciones innecesarias con los salvavidas, ya que esto los distrae de su trabajo
Si crees que estás 100% seguro si un socorrista monitorea el agua, estás equivocado. También ellos se distraen de vez en cuando. Si tienes una pregunta o necesitas ayuda, siempre están ahí para ti, por supuesto, pero no deberías quitarles más tiempo del absolutamente necesario. Esto los distrae y les impide hacer su trabajo: supervisar y, si es necesario, rescatar gente. También deberías enseñarles esto a tus hijos. Si necesitan ayuda, pueden acudir al socorrista, pero los padres son responsables de las quejas sobre juguetes perdidos o rotos, por ejemplo.
4. Aguantar la respiración no es un juego
¿Quién puede aguantar la respiración más tiempo? Los asistentes de la piscina ven este juego con los niños todos los días. Pero esto es extremadamente peligroso, y también debe quedar claro para los más pequeños. Las personas y especialmente los niños se cansan rápidamente y pueden perder el conocimiento. Esto no siempre tiene consecuencias graves, pero sigue siendo muy negligente y dificulta el trabajo del socorrista, que puede ignorar una emergencia "real" por estar vigilando a los participantes de este "juego".
5. ¡No te metas en el agua si has bebido alcohol!
Incluso pequeñas cantidades de alcohol tienen un efecto negativo en tu juicio. Estás convencido de que sabes nadar bien, de que el agua no es muy profunda, de que no has nadado muy lejos o de que aguantar la respiración es un juego divertido. Pero estas percepciones pueden ser erróneas debido al alcohol, por lo que puedes pasar por alto una situación peligrosa. El alcohol también puede deshidratarte y hacerte más susceptible a la insolación. La mayoría de los accidentes en el agua los provoca el consumo de alcohol.
6. ¡Mantente a la vista de los salvavidas! Si tú ya no los ves, ellos tampoco te verán a ti
El riesgo de ahogamiento es mucho menor en las zonas de baño controladas. Por lo tanto, solamente nada donde haya salvavidas que te tengan al alcance de la vista. Si están ahí es porque conocen muy bien los riesgos en la playa o en la piscina al aire libre, a diferencia de muchos bañistas. Recuerda que sobre todo en el mar hay corrientes dentro del agua, que no son reconocibles a primera vista. Intenta encontrar un punto fijo en la playa, por ejemplo, la bandera de la torre de rescate, en cuya dirección nades de vuelta una y otra vez. Esto te mantendrá en el campo de visión del salvavidas y también te permitirá saber si la corriente te está alejando de la playa.
7. Aléjate de los muelles
Los jóvenes, en particular, se sienten atraídos por los muelles, ya sea porque quieren saltar desde ahí y demostrar que son valientes, o porque creen erróneamente que el agua allí es poco profunda. Pero en realidad las corrientes en los muelles son más fuertes de lo que se piensa, porque las olas rompen en las columnas y no fluyen lentamente hacia la orilla. Esguinces, clavículas rotas, hombros dislocados o lesiones en la columna vertebral son causas frecuentes de esta imprudencia.
8. A los salvavidas no les gustan los accesorios inflables para nadar
Los equipos de natación inflables, como los neumáticos o los colchones de aire, pueden alejarse de la orilla de un momento a otro. Estos dan, a los niños en particular, una falsa sensación de seguridad, y los más pequeños suelen sobreestimar sus habilidades para nadar con ellos. El utensilio más seguro para los nadadores inexpertos o niños pequeños sigue siendo el chaleco salvavidas, pero solo si es apropiado para el tamaño y peso del usuario.
9. ¡Presta atención a los signos de insolación!
Unas pocas horas bajo el sol abrasador pueden provocar diversos daños en la salud. La insolación o incluso el colapso térmico pueden ocurrir como resultado de la deshidratación y la fuerte radiación solar. Por lo tanto, siempre debes asegurarte de tener contigo suficiente líquido. Evita el alcohol y el café, ya que ambas bebidas también deshidratan.
Presta atención a síntomas como mareos, dolores de cabeza, náuseas, vómitos, zumbidos en los oídos, ansiedad, agotamiento, aumento del pulso y dolor de cuello. Además, una fuerte quemadura de sol puede convertirse en un peligro en el agua. Si notas que tú u otra persona tienen estos síntomas, es necesario sentarse en la sombra inmediatamente, quitarse toda la ropa innecesaria y asegurarse de estar bien hidratado. Enfría tu cuerpo con una ducha o una toalla húmeda. Sin embargo, si experimentas síntomas graves como pérdida del conocimiento o quemaduras solares muy graves, debes consultar a un médico.
10. ¡Cuidado con los animales peligrosos en el agua!
Los tiburones, las medusas venenosas o las rayas son poco frecuentes en aguas locales. Pero nunca está de más tener cuidado durante las vacaciones.
En primer lugar, no debes tocarlos cuando los veas en el agua al lado o delante de ti. Incluso las medusas muertas pueden ser peligrosas, así que no dejes que tus hijos jueguen con estos animales marinos en la arena.
Si algo te muerde mientras nadas, comunícaselo de inmediato al salvavidas, quien sabe qué tratamiento es apropiado para cada lesión. Cuando corras sobre rocas, ten cuidado con las conchas o cangrejos de bordes afilados, ya que también pueden pellizcarte y provocarte dolor. Por cierto: orinar sobre la herida no ayuda. Lo mejor es no poner nada extraño sobre la herida.
11. ¡Nada paralelamente a la playa en una corriente de retorno de oleaje!
Las corrientes de retorno de oleaje son extremadamente peligrosas, especialmente para los nadadores sin experiencia. A menudo ocurren cerca de bancos de arena, embarcaderos o muelles. Los nadadores inexpertos suelen asustarse rápidamente y tratan de nadar hacia la playa con todas sus fuerzas. Así, consumen demasiada cantidad de su valiosa energía sin avanzar demasiado.
Por eso es importante mantener la calma y nadar paralelamente a la playa hasta que la corriente se reduzca notablemente. Luego dirígete a la playa en línea diagonal. Si no llegas a la playa, trata de llamar la atención para que el salvavidas u otro nadador experimentado puedan oírte o verte y enviar ayuda.
12. Las tormentas son un peligro real
Durante las tormentas, los socorristas suelen indicarnos que salgamos del agua. Pero algunos subestiman los peligros y no entienden de razones. El peligro es obvio, ya que el impacto de un rayo puede ser mortal. ¿Acaso te llevarías tu secador de pelo a la bañera? Así que debes salir del agua rápidamente si se aproxima una tormenta y esperar por lo menos 30 minutos después del último trueno hasta que volver a entrar al agua.
13. Caminar descalzo es una mala idea
Caminar descalzo en la piscina no solo es peligroso porque puedes resbalarte, sino también porque puedes contagiarte de una infección fúngica (hongos o pie de atleta). Por lo tanto, siempre debes usar chanclas, especialmente en las duchas o vestuarios.
Pero incluso en la playa puede ser peligroso correr descalzo, porque la arena puede calentarse demasiado y, en el peor de los casos, causar quemaduras.
14. ¡Apréndete el significado de las banderas en la playa!
En las playas del mundo hay banderas de diferentes colores, que indican peligros en el agua. Antes de nadar, asegúrate de saber lo que significan las banderas. Si no estás seguro, puedes preguntarle al socorrista.
En general, las banderas rojas representan olas y corrientes fuertes. Así que hay que tener mucho cuidado. En algunas playas una bandera roja también significa que la playa está cerrada y que está prohibido nadar.
Las banderas amarillas a menudo significan que hay que tener cuidado en el agua, porque las corrientes y las olas pueden ser fuertes. Sin embargo, nadar en estos lugares es relativamente seguro. No obstante, mantente siempre a la vista de los salvavidas.
Las banderas verdes significan que hay buenas condiciones para nadar y que el mar está en calma. Por supuesto, debes tener cuidado, ya que las condiciones pueden cambiar rápidamente. Las banderas azules o moradas significan que hay peligro en el agua. Por ejemplo, medusas venenosas o tiburones avistados en el área de los nadadores o cerca de la playa.
15. Está prohibido cavar agujeros profundos en la arena
En algunas playas está prohibido cavar grandes y profundos agujeros en la arena, ya que se han registrado varios accidentes en los que tanto niños como adultos se han asfixiado en estos agujeros después de que las paredes laterales se han derrumbado.
Recuerda que no todos los mares o lagos son aptos para nadar. Las condiciones y las reglas varían de un lugar a otro y deberías conocerlas y conocer las reglas antes de poner un pie en el agua. Si no estás seguro, no dudes en pedir consejo o ayuda al socorrista. De esta forma, nada impedirá que pases un día divertido, seguro y relajado en contacto con el agua.