Cómo limpiar el polvo en casa con 20 trucos geniales

Acabar con el polvo es parte esencial de la rutina diaria de limpieza de cada casa. Y aunque sea una tarea relativamente sencilla, no siempre la realizamos correctamente. El polvo siempre acaba acumulándose en los pequeños recovecos y esquinas, y en algunas zonas es dificilísimo de sacar. Lo cierto es que se ve muy feo cuando una capa de polvo recubre un mueble de casa. Además, puede ser malo para la salud, en el caso de personas con asma o alergia. 

Por suerte, hay algunos trucos y consejos para limpiar el polvo. Hemos reunido los 20 mejores en este artículo:

1. Radiadores

En los radiadores se suele acumular mucho polvo, ya que es un lugar que no se suele limpiar con regularidad. Por supuesto, no es un lugar fácil de limpiar con los métodos habituales, ya que sus recovecos son difíciles de alcanzar. Para hacerlo, puedes envolver una regla con paño de microfibra. Con esta podrás limpiar la parte posterior del radiador y también la zona entre las rendijas.

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2. Toallitas húmedas para bebés

Para eliminar el polvo, migas y manchas del teclado de tu ordenador, puedes usar toallitas húmedas para bebés. Primero sacude el teclado para que caiga la mayoría de las migas y luego pasa una toallita húmeda por encima. Esta no solo eliminará las manchas y restos de migas; también evitará que el polvo se vuelva a asentar tan fácilmente. Sin embargo, antes de pasar la toallita, asegúrate de que tanto el ordenador como el teclado están apagados. 

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3. Mopa

Envuelve una fregona o escoba con un paño de microfibra. Así podrás alcanzar zócalos, lugares altos de la pared y esquinas sin necesidad de echar mano de una escalerilla. 

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4. Brocha

Las brochas también son muy buenas para sacar el polvo de teclados de ordenador u otros objetos delicados que son difíciles de limpiar con un trapo.

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5. Paño de microfibra

Un buen paño de microfibra puede obrar maravillas. No solo recoge el polvo de todo tipo de superficies: también agarra bien las partículas de polvo y no las deja de nuevo libres en el aire. Por ello, es un elemento esencial en todo hogar. 

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6. Bombillas

Con el calor, el polvo se queda muy pegado a las bombillas. Para eliminar las capas más resistentes de polvo, echa un poco de alcohol de limpieza en un trapo y frota la bombilla con este. La diferencia es sorprendente. Pero antes de hacerlo, apaga la lámpara, espera a que se enfríe y desenrosca la bombilla de la lámpara. 

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7. Bolsas para la ropa

La ropa, sábanas, mantas y edredones son una fuente de acumulación de polvo en toda casa. Para evitar que estos acumulen polvo, guárdalas en bolsas para la ropa o sellables. Así estas no acumularán polvo ni tampoco lo dispersarán por tu casa. 

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8. Guantes de tela

Unos simples guantes de tela pueden serte muy útiles en las tareas del hogar, porque con ellos podrás quitar el polvo de lugares sensibles, como lámparas, bombillas, figuras de vidrio o estatuas. Sus fibras atrapan polvo, facilitándote las tareas de la limpieza. 

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9. Plantas de interior

Las plantas de interior son los pulmones de tu hogar y te ayudan a mantener el polvo bajo control. Para que sigan limpiando el aire con eficacia, riégalas con agua bajo la ducha para sacarles el polvo.

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10. Cortinas

Muchos olvidan las cortinas a la hora de limpiar la casa, pese a que estas acumulan mucho polvo; especialmente cuando son de materiales sintéticos. Sin embargo, es necesario lavarlas al menos una vez al año y limpiarlas con frecuencia (unas dos veces al mes). Esto último se puede hacer con la aspiradora limpia. 

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11. Persianas

Quien tenga persianas en las ventanas conoce el problema: muy prácticas para protegerse del sol, pero complicadísimas de limpiar. Para ello, toma un calcetín viejo e introduce la mano en él. Con este podrás limpiar y sacar el polvo listón a listón. 

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12. Filtro del café

Ya sea en el tablero de mandos del coche o en el televisor de la sala de estar, el polvo siempre se ve mejor en las superficies oscuras. Para eliminar eficazmente la capa de polvo de estos, utiliza filtros de café, ya que son especialmente adecuados para superficies planas. Además, son lo suficientemente suaves como para no dejar rasguños en las pantallas y absorben bien el polvo.

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13. Calcetines

Si eres de los que pierdes calcetines constantemente y no sabes qué hacer con los pares sueltos, tenemos la solución para ti. En lugar de tirarlos, úsalos para limpiar el polvo de tu casa. Por ejemplo, puedes utilizarlos como sustitutos de paños caros para limpiar el suelo. Puedes cubrir tu mopa con uno. Después de limpiar, simplemente lávalo en la lavadora y vuelve a utilizarlo la próxima vez. 

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14. Aspiradora

Prácticamente todas las aspiradoras tienen diferentes boquillas para llegar hasta los rincones más inaccesibles. Si tu aspiradora no es una de ellas, también puedes simplemente usar un rollo de papel higiénico uniéndolo al tubo de la aspiradora. Puedes apretarlo y darle forma a tu gusto para que llegue hasta los huecos y ángulos más inaccesibles. Simple y efectivo.

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15. Edredones

Si sacudes y ventilas tus edredones y almohadas cada mañana, evitarás que los ácaros del polvo se asienten en ellos demasiado rápido. Pero también hay mucho polvo en las alfombras, por lo que especialmente los asmáticos y los alérgicos deben aspirarlas con aspiradora regularmente y, si es posible, sacarlas fuera de casa.

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16. Ventiladores de techo

Los ventiladores de techo acumulan polvo, especialmente en invierno, cuando no los utilizamos. Pero para no esparcir el polvo por toda la habitación al limpiarlos, toma una funda de almohada y cubre el brazo del ventilador. Así uno a uno podrás retirar el polvo de cada brazo. El polvo se quedará en la funda de almohada y no en la alfombra o armario. 

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17. Toallitas para secadora

Las toallitas para secadora que ya hayas utilizado no tienen por qué ir a la basura. Son estupendas para sacar el polvo de muebles y estanterías. Agarran el polvo y no lo sueltan. Después ya puedes tirarlas. 

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18. Conductos de ventilación

Los conductos de ventilación del baño pueden acumular mucho polvo y muchas veces no basta con el aspirador para limpiar los recovecos. Usa spray de aire comprimido para limpiar las rendijas. Para limpiar la ventilación del techo, usa un gorro o máscara para que no te caiga el polvo directamente en la cara. Para acabar con el polvo de los conductos de ventilación para siempre, puedes frotarlas con cera para coches. Así será muy difícil que el polvo se asiente y el conducto quedará libre de polvo durante los próximos 12 meses.  

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19. Plantas artificiales

El polvo se asienta con especial rapidez en las plantas artificiales y a menudo es difícil de eliminar. Para que vuelvan a brillar, toma un paño y una gota de mayonesa. Frota las hojas de las plantas con este para quitarles el polvo y hacerlas parecer como nuevas otra vez.

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20. Medias

Pero no solo en las plantas artificiales: en las velas también se asientan pequeñas capas de polvo que no se eliminan bien con un paño o plumero. Para ello, usa una media vieja o con agujeros. Haz una bola con ella, podrás sacar el polvo de la vela sin dañar la cera. 

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El polvo de casa no es fácil de eliminar, pero es posible reducirlo a un mínimo. Una gran parte del polvo viene de fuera. Para evitarlo, no dejes las ventanas abiertas todo el día en verano y solo ábrelas para airear. También ayuda pasar un paño húmedo por todas las superficies y paredes para reducir el polvo. 

Créditos:

Bright Side

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