Anestesia total: 7 síntomas que manifiesta tu cuerpo

La anestesia total es inevitable en algunos procesos médicos complejos. Sin embargo, estar anestesiado no tiene nada que ver con un sueño normal: a pesar de que el cuerpo se encuentra dormido, la anestesia total no permite que el cerebro reaccione a los dolores, es decir, que no percibe lo que le sucede. 

Incluso aunque un paciente experimente la anestesia de forma similar a dormir, la realidad es que en el cuerpo ocurren muchas cosas. Algunos síntomas pueden generar alarmas en las personas que no son profesionales de la salud:

1. Vómitos

Las náuseas y vómitos son una reacción natural del cuerpo al desvanecimiento. Suena aterrador, pero hay un buen motivo para que el cuerpo tenga el reflejo de vomitar apenas pierde el conocimiento: a través de este mecanismo, el cuerpo intenta deshacerse de todo aquello que haya causado este estado. El personal de salud, consciente de esto, busca combatir los síntomas a través de medicamentos contra las náuseas con el fin de reducir la reacción. Además, se procura que el paciente no ingiera alimentos en las seis horas anteriores a la anestesia total para evitar que el contenido del estómago acabe en los pulmones. 

Frau bekommt Narkose

2. Piel de gallina y escalofríos

No todas las reacciones corporales se manifiestan por una anestesia total. A causa de la caída de la temperatura corporal, muchos pacientes muestran piel de gallina o escalofríos. Aunque aún se encuentra anestesiado, este tiritar da la impresión de que el paciente ha despertado. 

3. Pérdida de control en el habla

En algunas ocasiones, la anestesia hace que las personas comiencen a develar secretos y a contar cosas que no se las contarían a nadie. Los medicamentos que son suministrados antes de la anestesia actúan en muchos casos como una especie de pócima de la verdad. 

Mann nach Narkose im Krankenhaus

4. Pérdida de memoria

Otro efecto de los medicamentos previos a la anestesia es la pérdida de memoria. Incluso aunque estés despierto, lúcido y puedas conversar, puede ocurrir que, luego de la operación, te hayas olvidado completamente lo que has dicho en ese momento. 

5. Pánico

Durante el comienzo del suministro de anestesia el cuerpo puede manifestar síntomas extraños. A medida que la sustancia va penetrando en tu cuerpo e influenciando algunas funciones tales como el pensamiento, la respiración y el movimiento, tu cerebro nota por un breve momento que algo no va bien e intentará, como reacción, "salvarte" de una forma a veces bastante radical. El cuerpo comienza a estremecerse, la respiración se reduce de repente y la frecuencia cardíaca puede aumentar o disminuir bruscamente. El cerebro pone al cuerpo en un estado de pánico para evitar la pérdida de conocimiento. Pero no temas: se trata de una reacción natural, que dura muy poco tiempo y en la que tendrás en todo momento el apoyo y la observación del personal de salud. 

Anästhesist versetzt Patient in Vollnarkose©Pixabay/Stefan_Schranz

6. Estreñimiento extremo

Algunos tipos de anestesia pueden generar una ralentización en los procesos digestivos, lo que se manifestará luego de despertar en un fuerte estreñimiento. Esto puede empeorar si debes tomar medicamentos anestésicos en la etapa postoperatoria. 

7. Alucinaciones y sueños intensos

Algunos pacientes cuentan acerca de sueños salvajes y vívidos que tuvieron durante la anestesia total. Sobre todo la sustancia anestésica conocida como ketamina produce en un 10 hasta 30% de los pacientes sueños y alucinaciones. 

Patient schläft im Krankenhaus nach Vollnarkose©Unsplash/Sharon McCutcheon

Para muchas personas, la anestesia total puede ser atemorizante: existe el miedo a perder el control, a que se produzcan daños irreversibles o a despertar durante la operación. Pero incluso aunque los síntomas de la anestesia pueden ser muchas veces intensos y desagradables, los riesgos de complicaciones serias son extremadamente bajos, incluso con pacientes con enfermedades graves. 

Fuentes: romper, praxisvita

Imágenes en miniatura: ©flickr/Critical Moss

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