7 errores en la planificación de bodas que los invitados odian

Tan pronto como el anillo de compromiso aterriza en el dedo de la novia, la planificación de la boda empieza a rondar por las cabezas de los novios. ¿Cómo será el vestido de novia? ¿Dónde será la celebración? ¿Es mejor una ceremonia más pomposa o algo entre los más allegados? 

Con los preparativos de bodas, uno quiere cumplir tanto las expectativas de sus invitados como los deseos propios de lo que se quiere para ese día especial. Al fin y al cabo nadie quiere sellar su amor mientras sus invitados se mueren del aburrimiento o encuentran algo de lo que quejarse. 

Para no tener que preocuparse por todo esto, hay que evitar los siguientes errores típicos en la planificación de una boda. Así, podrás disfrutar de tu día sin preocupaciones. 

1. Pensar solo en los invitados

Puede soñar extraño pero es algo fundamental: no te preocupes mucho por lo que a tus invitados les guste. Y es que mientras ustedes disfruten de su día y se sientan a gusto, ellos también lo harán. 

Denle a su celebración su sello personal. Así sus invitados vivirán un momento único, alejado de la monotonía de algunas bodas. ¿Son fans del country? ¡Cambien el baile nupcial por una canción de su estilo favorito! ¿Se comprometieron en París? ¡Den a la boda un toque francés!

2. Parones

Las pausas largas pueden dañar el espíritu festivo a la larga. ¿La ceremonia es a las 10 de la mañana pero quieren empezar la celebración a las 16 para poder hacerse fotos en el intermedio? No hay problema mientras tengan a sus invitados entretenidos. Un poco de música, picoteo y un "photobox" a menudo son suficientes. 

En general, cada parte de la boda debe ser corta y concisa. No dejes que haya una "fila de felicitaciones", mézclate en la fiesta y así todos podrán felicitarlos sin aburrirse en una larga cola. 

3. Demasiada "acción"

Hay muchísimas tradiciones y actividades creativas que pueden planearse a lo largo de la fiesta. Pero lo mejor es escoger solo unas cuantas, siguiendo el lema "calidad frente a cantidad". 

Lo mismo vale para los discursos: sobre todo cuando se dan en las pausas del menú, la comida que ya se haya servido corre el riesgo de enfriarse. 

4. Interferir en planes de vacaciones

Con la fecha de la boda no se puede contentar a todos, está claro. Pero al menos deberías hablarlo con tus personas más allegadas para que no se pierdan tu gran día. 

Por otro lado, hay algo que odian los invitados a las bodas: que la fecha coincida con sus vacaciones o con puentes, ya que estás interfiriendo en sus planes. 

5. Falta de espacio en celebración

No es nada fácil encontrar lugares bonitos y baratos para la celebración de tu boda. Pero lo que tienes que tener en cuenta es que sea adecuado para el número de invitados, y que estos no se encuentren con poco espacio. Uno de las razones para que el ambiente de la boda no sea bueno es la falta de espacio. 

Las habitaciones pequeñas te obligan a poner mesas largas y a establecer los asientos de forma rígida. Ambas cosas reducen la capacidad de socializar de los invitados. Tampoco hay que olvidar que los camareros tienen que llegar bien a los comensales para poder tomar las comandas de forma cómoda. 

Mejor invitar a un número reducido de personas que atestar una sala de gente. Las invitaciones por obligación deberían ser ya historia, de todas formas. 

6. Obligación de pasarlo bien

En las celebraciones de bodas se encuentran dos familias (a veces, por primera vez). Para romper el hielo, es bueno a veces realizar actividades. Pero con esto hay que tener cuidado: a nadie le gusta que lo obliguen a pasárselo bien. 

Por tanto, prescinde de juegos donde los invitados tengan que presentarse obligatoriamente o realizar algún acto ridículo. Algún juego de memoria para recordar los nombres de los invitados o un bingo pueden animar mucho la celebración sin tener que sacar a nadie de su zona de confort. 

7. No tener en cuenta a los niños

Las celebraciones de boda pueden convertirse rápidamente en una tortura para los niños: un menú de 5 platos que dura hasta la noche, largos discursos y todo esto rodeados de un montón de caras desconocidas. Los padres de los niños aburridos tampoco disfrutarán en consecuencia. 

Asegúrate de crear un buen rincón donde los pequeños invitados puedan sentirse cómodos y jugar o pintar sin ser molestados. También es importante disponer un lugar donde puedan moverse libremente y con seguridad. Cuanto más cómodos se sientan los pequeños, más libertad tienen sus padres para disfrutar sin preocupaciones de la celebración de la boda.

Por supuesto, estas recomendaciones varían dependiendo de tus invitados. Es importante conocerlos y saber lo que quieres en tu boda para poder disfrutar lo máximo posible. Cada boda es algo especial y las ideas rígidas no son lo mejor. 

Pero lo más importante de todo es saber qué escollos hay que evitar para poder disfrutar del día lo más feliz y relajadamente posible.