Nueve fascinantes aspectos sobre el cerebro humano
El cerebro es el órgano más fascinante del cuerpo humano. Los científicos aún no han desentrañado todos sus misterios; por esta razón, los resultados de investigaciones más recientes nos resultan tan sorprendentes. Es muy probable que todavía no hayas oído hablar de estos nuevos descubrimientos:
1. El cerebro tiende a deshidratarse.
El cerebro humano se compone de 3/4 de agua. Basta con que esté deshidratado en un 2% para que afecte negativamente la memoria a corto plazo y la concentración. Esta es una de las razones por las que deberías beber por lo menos ocho vasos de agua por día.
2. La mayoría de las decisiones se toman de forma inconsciente.
Puedes sopesar los pros y los contras las veces que quieras, pero el 95% de las decisiones que tomas son completamente inconscientes (aunque hay algunas formas de hacerlas conscientes...).
3. El cerebro puede consumirse a sí mismo.
Puede sonar truculento, pero es una realidad. Nuestro cerebro consume un cuarto de las calorías que ingerimos a diario. Por esta razón, las dietas de choque en particular, pueden conducir al cerebro a un estado serio de desnutrición. Para recuperarse, el cerebro empieza a destruirse a sí mismo consumiendo sus propias células para obtener energía. Se trata de un tipo de canibalismo por supervivencia.
Para evitar que esto suceda es importante mantener tu organismo bien alimentado, ¡así que nada de dietas drásticas si quieres conservar tu agilidad mental!
4. Sudar puede contraer tu cerebro.
El ejercicio es saludable y una verdadera fuente de juventud. Pero no debes ir más allá de los límites: los investigadores han descubierto que después de una hora y media de secretar una buena cantidad de sudor, el cerebro empieza a contraerse. Después de 90 minutos de ejercicio constante, el cerebro puede contraerse tanto como lo hace en todo un año. No resulta sorprendente si tomamos en cuenta que está compuesto de agua en un 73%. Así que, de nuevo, bebe suficiente agua, especialmente en el gimnasio, y plantéate dividir tus entrenamientos en segmentos cortos.
5. El cerebro no almacena información cuando estás borracho.
Si despiertas con la mente en blanco y te preguntas a ti mismo qué diablos pasó la noche anterior, lo más probable es que hayas bebido demasiado. Las lagunas mentales no son en realidad "olvidos", ya que en realidad tu cerebro nunca llegó a almacenar la información. Beber alcohol en exceso no solo daña tus órganos internos (¡pobre hígado!), sino que inutiliza tu cerebro. Simplemente, no puedes almacenar información si has bebido más de la cuenta.
Esto te puede colocar en una posición bastante vulnerable (a menos que te encuentres en una situación que de verdad prefieras olvidar).
6. El período de nuestra atención mental es más breve que el de un pez dorado.
Suena como un insulto, pero está científicamente demostrado: el período de atención del cerebro es de ocho segundos, mientras que el del pez dorado es de nueve. Esta es una de las razones por la cuales podemos realizar diferentes tareas simultáneamente.
7. El cerebro no sabe lo que es el dolor.
Cuando nos tropezamos y caemos al suelo, nuestro cerebro envía una señal para que podamos sentir dolor. Pero el cerebro por sí mismo no tiene la aptitud de sentir dolor. El cráneo y la membrana cerebral tienen receptores del dolor, pero no el órgano por sí mismo. Es por ello que las operaciones del cerebro pueden realizarse sin anestesia.
8. El cerebro necesita la misma cantidad de energía que una bombilla.
Incluso en un día en el que no realices ninguna actividad, tu cerebro sigue necesitando un quinto de tu energía total, lo que equivale a lo que consume en un día una bombilla tradicional de 25 vatios.
9. Tu cerebro se sigue desarrollando hasta que cumples 25 años.
Algún día tiene que detenerse y eso sucede cuando llegas a los 25 años. A los 26, tu cerebro está completamente maduro y no va a desarrollarse más. Sin embargo, y esto es grandioso, existe una gran cantidad de estudios sobre la plasticidad del cerebro que demuestran que aunque la configuración es permanente, puede seguir aprendiendo y cambiando constantemente.
Se trata de un órgano increíble que se encuentra allí arriba, dentro de nuestro cráneo: siempre es útil saber todo lo que puede hacer, ¡ y cómo podemos cuidarlo!