6 pasos para limpiar la cisterna del baño
La cisterna del inodoro (conocida en algunos países como "mochila") es uno de esos lugares que en la limpieza del baño nos complace olvidar. Sin embargo, es importante mantener una buena higiene también allí, ya que de lo contrario se generarán, además de las desagradables manchas calcáreas, problemas con la contención del agua que pueden llegar a causarte, cuando llegue la factura a pagar, muchos dolores de cabeza.
La concentración de cal en el agua varía de lugar en lugar. Cuanta más cal tengas, más manchas encontrarás en la cocina y en el baño. En este caso, los lugares más afectados por la concentración de cal son los lavavajillas, los caños y también las cisternas de los baños.
En muchas ocasiones, cuando se generan en la cisterna acumulaciones de cal, esto produce un funcionamiento deficiente que lleva a una permanente corriente de agua (y a que se acumule también muy poca agua en la cisterna).
En este artículo te contamos qué remedios caseros son ideales para la limpieza de la cisterna.
Elegir los productos de limpieza
Antes de comenzar, es importante que elijas bien qué productos de limpieza vas a utilizar. Ya que las sustancias terminarán, luego de la limpieza, en el sistema de desagües y cloacas del lugar en donde vives, te recomendamos la utilización de remedios caseros que no dañarán -como los productos de limpieza químicos- el medioambiente de tu ciudad.
- Vinagre
Una de las opciones más sencillas para la limpieza regular de la cisterna o para cuando encontramos pequeñas manchas de cal es la utilización de vinagre.
- Ácido cítrico
En caso de una suciedad moderada, el ácido cítrico será tu mejor opción para la limpieza de la cisterna.
- Ácido clorhídrico
Si hasta ahora nunca has limpiado la cisterna de tu baño, recurre mejor al ácido clorhídrico, una sustancia fuerte que removerá hasta las manchas más difíciles.
Abrir la cisterna
- Cisterna mochila
En este tipo de cisterna la tapa está sujeta con unas pinzas a los costados. Para abrirla, levanta la tapa unos centímetros y abre las pinzas. Luego de la limpieza, coloca nuevamente la tapa, ejerciendo un poco de presión para que se cierre correctamente.
- Cisternas empotradas
En este caso, la cisterna se encuentra en el interior de la pared, haciendo su acceso algo más difícil que en el caso de la cisterna mochila. Para abrirla, empuja la tapa ligeramente hacia arriba y luego sepárala de la pared. Luego, desatornilla el mecanismo para acceder a la cisterna. Después de limpiarla, vuelve a armar la cisterna en el orden contrario, es decir, atornillar el mecanismo y colocar la tapa.
Si lo crees necesario, para la limpieza de la cisterna trabaja con guantes de látex, detén el flujo de agua y sigue las siguientes instrucciones con mucha atención.
1. Desensamblar las partes mecánicas
- Palanca
Saca la palanca de la cisterna de sus goznes para poder levantar el tapón de cierre y liberar el agua. De esta forma, puedes controlar y limpiar todas las partes en calma.
- Flotador
Incluso antes de dejar correr el agua, desensambla el flotador que se encuentra justamente flotando dentro de la cisterna.
- Válvula de llenado
Una vez sacados la palanca y el flotador, saca también la válvula de llenado que se encuentra sujetada a la cisterna a través de una tuerca.
2. Controlar las juntas
Controla las manchas de cal, la suciedad y daños de las juntas de la cisterna en la parte inferior y superior y, de ser necesario, cámbialas por unas nuevas.
3. Dejar en remojo los componentes
Deja remojar en un bote con agua las diferentes partes de la cisterna para que se libren de las manchas de cal. Puedes también aprovechar la oportunidad para controlar posibles roturas y daños.
4. Dejar la cisterna en remojo
Vuelve a colocar las juntas para que la cisterna quede herméticamente cerrada. Luego, pon agua y el producto de limpieza dentro y déjalos actuar por unas horas.
4. Limpieza final
Por último, utiliza un cepillo duro para limpiar a fondo todas las zonas de la cisterna.
6. Ensamblar y controlar
Luego de la limpieza, vuelve a ensamblar todas las partes en el orden correcto: primero la válvula, luego el flotador y por último la palanca. Controla todo una vez más y coloca la tapa de la cisterna antes de activar el flujo de agua en el baño.
¿Hace cuánto que no limpias ese lugar recóndito del baño? Sabemos que puede ser algo muy tedioso, pero te aseguramos que su limpieza vale mucho la pena, y no solo por los evidentes motivos higiénicos: también te ahorrarás así mucho dinero en reparaciones y en gastos de agua.
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