Transforma tu cocina en un laboratorio y extrae el ADN de una fresa
Algunas veces es difícil atraer el interés de los niños en la ciencia. En la escuela los conceptos suelen ser muy técnicos y abstractos, por lo que resulta complicado saber cómo funcionan en el mundo real. Pero el siguiente experimento es un ejemplo de que la ciencia puede ser muy divertida, bueno, al menos la biología.
Se trata de extraer ADN (ácido dexosirribonucleico), un tema muy candente para aquellos que son adictos a las series policíacas. Es un experimento muy fácil, y lo más probable es que tengas los ingredientes que necesitas justo en tu cocina.
Vas a necesitar:
- Una fresa
- Una bolsa para congelar
- Un colador
- Un embudo
- Una taza
- Una pipeta
- 118 ml de alcohol de enfermería
Para la solución de extracción:
- 78 ml de agua caliente
- 1/2 cucharadita de sal
- 1 cucharada de jabón para platos o detergente líquido para ropa
Se hace así:
Primero prepara la solución de extracción mezclando el agua, la sal y el detergente en un recipiente. Pon la fresa en la bolsa y agrega de una a tres cucharadas de la solución de extracción.
Saca todo el aire de la bolsa y ciérrala.
YouTube/BioNetwork
Tritura suavemente la fresa dentro de la bolsa.
Coloca un filtro de café o una tela de quesería sobre el embudo y vierte el contenido de la bolsa en una taza. La pulpa restante no debe mezclarse con el líquido de la taza. Por el contrario, exprime la tela lo más posible y después tira los restos de pulpa.
También puedes usar un colador muy fino para esta parte del proceso.
Ahora agrega el alcohol de enfermería al líquido que sacaste de la bolsa de congelar. En poco tiempo notarás que se forman pequeños hilos, se trata de líneas de ADN. Puedes extraerlas con la ayuda de una pipeta.
No hay mucho que puedas hacer con el ADN de la fresa, pero el objetivo del experimento es otro. Se trata de comprender que este pequeño fragmento viscoso es, en realidad, la base fundamental de la vida. Es fascinante pensar que todos los organismos vivos están compuestos por esta pequeña, y en apariencia simple, gota de información.
Para ver de cerca esta fascinante sustancia, ponla sobre un plato y obsérvala a través de una lupa. Si tienes un microscopio, será mucho mejor.
Puedes ver todo el experimento en este vídeo:
Puedes realizar este experimento usando cualquier tipo de fruta o verdura: los plátanos, por ejemplo, también sirven muy bien para este fin. ¡Una forma maravillosa de acercarte a la ciencia!