11 mentiras sobre el embarazo al descubierto
En el instante en que una mujer sostiene un test de embarazo positivo en sus manos comienza una época maravillosa de su vida. Aunque cada embarazo tiene sus particularidades, las experimentadas mamás ya cuentan con una gran cantidad de conocimientos sobre el tema.
La información que ya existe sobre esas 40 semanas es tanta que puede resultar abrumadora. Entre tantos datos se cuelan de vez en cuando falsas nociones que preocupan sin necesidad. La siguiente lista desenmascara 11 mitos que circulan sobre el embarazo y que son totalmente falsos:
1. "La cesárea es la solución más sencilla".
Muchas mujeres optan por hacerse una cesárea pese a estar sanas. Sin embargo, los médicos recomiendan que esta se practique únicamente cuando haya que salvar la vida del niño o la madre. El parto no natural tiene ciertas consecuencias en partos futuros. Además, tras la cesárea, se sufren dolores durante más tiempo que con el parto vaginal.
2. "Un poquito de alcohol no daña al niño".
Esta errónea creencia puede tener consecuencias fatídicas para el bebé. En cuanto la mamá consume alcohol, su feto también lo hace. No importa cuánto beba: una cantidad mínima puede provocar daños permanentes al feto. El consumo de alcohol durante el embarazo causa en el feto problemas mentales y físicos, como por ejemplo enfermedades cardíacas. Estos pueden curarse solo en raras ocasiones.
3. "Las caderas anchas facilitan el parto"
En el pasado las caderas anchas se consideraban atractivas y las mujeres que las tenían se pensaba que eran más fértiles que las demás. Sin embargo, esta noción se trata de un mito, en el que pese a todo se sigue creyendo a día de hoy. Lo determinante en este caso es el canal del parto, que es por donde el bebé tiene que pasar. Pero el tamaño de este tampoco hace el parto más fácil; desde ya tienes que saber que el parto no es ningún camino de rosas.
4. "Dormir sobre el vientre daña al bebé".
Durante mucho tiempo se pensó que dormir sobre el vientre daña al feto. En principio suena lógico, pues podría pensarse que el bebé quedaría oprimido bajo la presión. Pero a las que les guste dormir sobre el vientre pueden quedarse tranquilas: el útero, y por tanto el feto, están protegidos por una musculatura firme, que no cede bajo la presión. Mientras sea cómodo, la embarazada puede disfrutar de su favorita posición al dormir.
5. "Solo se tienen náuseas por las mañanas".
Uno de los síntomas más conocidos del embarazo son las náuseas. Un 80% de las embarazadas sufren las denominadas náuseas matutinas. Pero pese a su nombre, la mayor parte de las embarazadas las padecen durante todo el día. Una cuarta parte de ellas sufren náuseas y vómitos durante los 3 primeros meses, y algunas incluso hasta antes del parto.
6. "El bebé no nota nada que provenga del exterior".
Durante mucho tiempo los padres y médicos pensaron que los bebés solo empiezan a ser conscientes del entorno que los rodea cuando nacen. Pero ahora hay estudios que han descubierto que los fetos captan más del mundo exterior de lo que se pensaba. La voz de la mamá los calma y cuando la luz baña el vientre, el feto se da la vuelta. Por tanto, nada más lejos de la realidad que lo que antes se pensaba.
7. "Durante el embarazo no debe salir a correr".
Estar embarazada no debe ser un impedimento para seguir practicando deporte. ¡Todo lo contrario! Por ejemplo, correr es saludable y puede ayudar a combatir las náuseas. Si se tienen complicaciones, como por ejemplo, alta presión sanguínea o se va a empezar a correr por primera vez, es recomendable consultarlo antes con el médico.
8. "En el parto se pierden todos los kilos del embarazo".
Por supuesto, tras el parto se pesa menos no solo por el niño: también por la placenta y la gran cantidad de líquido. Sin embargo, la grasa que se ha consumido durante los pasados 10 meses no desaparece por arte de magia. Dependiendo de cuánto peso se ha ganado se tardará más o menos en perderlo.
9. "Todas las mujeres son felices durante el embarazo".
"Las embarazadas parecen muy felices y contentas durante el embarazo, así que tienen que estarlo", piensan muchos. Por supuesto, toda embarazada está contenta de tener un hijo, pero eso no significa que siempre estén contentas. Las hormonas que se producen durante el embarazo tienen influencia en el cerebro, y las futuras mamás pueden sentir miedo, tristeza y otras emociones negativas. Algunas sufren incluso depresión, que debe tratarse lo antes posible para no poner en peligro ni a ella ni al bebé.
10. "Hacer ecografías con demasiada frecuencia puede dañar al bebé"
Las ecografías no pueden dañar nunca al bebé. Estas no usan radiactividad y la transmisión de las ondas es muy rápida; por ello, no hay ningún peligro.
11."La forma de la barriga determina el sexo del bebé".
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Muchos papás desean conocer el sexo de su bebé cuanto antes y algunos piensan que el tamaño del vientre de la mamá puede dar pistas sobre este. Por desgracia, esto no es tan fácil. La forma y tamaño de la barriga solo están determinados por el peso y la posición del niño. El sexo del bebé solo puede conocerse a través de una ecografía a partir de la 20ª semana de gestación.
Algunas de estas nociones son muy tranquilizadoras, ¿verdad? En todo caso, si se tienen dudas, por supuesto lo mejor es consultarlo con un médico o matrona. Ellos son los que pueden aconsejar sobre estos temas con conocimiento.