Vida eterna: transforma una bombilla en terrario de larga duración
La ciencia cada vez nos ofrece más avances, pero aún estamos a años luz de conseguir el elixir de la vida eterna para el ser humano. Pero este diminuto terrario hecho por ti al menos te permitirá llevar un poco de esa energía autosostenible a tu hogar. Es muy entretenido ver cómo se genera vida ante tus ojos, y además este proyecto es beneficioso para el medioambiente.
Necesitarás:
- Bombilla.
- Guantes de trabajo.
- Alicates.
- Destornillador.
- Pistola de pegamento caliente.
- Piedra grande.
- Papel.
- Palo de madera.
- Pinzas.
- Jeringuilla.
- Gravilla.
- Arena.
- Tierra.
- Musgo.
- Bellotas, etc.
Instrucciones:
Advertencia: NO uses bombillas de bajo consumo; estas contienen mercurio, que es tóxico y puede provocar graves problemas de salud si se inhala o toca.
El primer paso es ponerte los guantes protectores para que tus manos no sufran daños. A continuación, extrae la pequeña pieza plateada del centro de la bombilla con los alicates.
Entonces podrás meter la punta de los alicates en el agujero y sacar la base negra.
Luego usa el destornillador para romper la pequeña lamparita de dentro de la bombilla. Asegúrate de tirar todos los restos de cristal.
Echa unos cuantos puntos de pegamento caliente sobre un lado de la piedra. Esto formará la base de tu terrario y el pegamento ayudará a que todo quede estable.
Coloca la bombilla en la posición que desees sobre la piedra.
Forma un pequeño embudo con el trozo de papel y ¡prepárate para llenar tu bombilla! Es hora de darte un paseo por el bosque si aún no lo has hecho.
Primero vierte una fina capa de gravilla al fondo. Esta servirá para acabar con cualquier exceso de agua. A continuación, agrega una capa de arena; el palo de madera te ayudará a distribuirla equitativamente.
La capa final es de tierra. Coloca cuidadosamente las plantas y el musgo que quieras con unas pinzas. Unas cuantas conchas o un tronquito le darán un lindo toque a tu terrario.
Lo único que queda es verter unas gotas de agua sobre tu obra.
Para que tu terrario quede bien hermético y saludable, puedes cerrarlo con una piedra y pegamento caliente. Una vez sellado, se formará un ecosistema en miniatura.
¡Guau! ¡Tu propio microcosmos! Es difícil de creer, pero las plantas tienen dentro todos los nutrientes que necesitan.
Puedes elegir cómo quieres colocar tu terrario en casa: a continuación puedes ver un ejemplo minimalista en el que se ha utilizado un tapón de corcho.
Aquí tienes un vídeo explicativo en ruso... pero ¿no es cierto que una imagen vale más que mil palabras?:
Este terrario en miniatura te permite ser testigo del asombroso ciclo de la vida: el agua se evapora y queda condensada en el vidrio. Luego, se funde con el suelo y nutre a las plantas. Por supuesto, algunas plantas morirán, pero dejarán espacio y energía para que crezca nueva vida. Si aún te quedan dudas, mira este otro vídeo (esta vez en alemán) del terrario un mes después: se están formando nuevas plantas y ¡los gusanos abundan!