5 causas que explican los ataques de rabia de tus hijos

¿Tienes la impresión de que tus hijos se comportan como angelitos con otras personas y como demonios contigo? Lamentamos decirte que no es solo una impresión: los niños tienden a mostrarse furiosos cuando están cerca de su madre. Pero no te preocupes, no quiere decir que hayas fallado como mamá. De hecho, todo lo contrario: se trata más de un cumplido. Y si no nos crees, lee las 5 causas de los ataques de rabia a continuación. 

1. Se sienten muy seguros con su mamá

Los niños tienen con sus madres una seguridad que no tienen con otras personas. Cuando están con ella, flotan en una burbuja de seguridad en la que pueden ser ellos mismos y manifestar toda la carga emocional que sienten porque saben que el amor y el apoyo de su madre es incondicional. A través de un ataque de ira los niños muestran su costado más frágil. Un costado que solo sale a luz cuando hay mucha confianza. 

Happy boy

2. Necesitan la atención de su madre más que de ninguna otra persona

La madre es por lo general la persona más importante en la vida de un niño. Por eso, en cuanto sienten que deben compartir su atención (ya sea con sus hermanos, con su padre, mascotas o trabajo), intentan a través de un ataque de ira recuperarla. Incluso aunque solo obtengan un regaño, por lo menos recuperan la atención deseada. 

Tantrum

3. Miden sus límites con su madre

Probar los límites es para los niños algo natural. Los pequeños saben que la relación con su madre es algo seguro y les resulta entonces fácil contestar, rebelarse y mirar cuáles son los límites de su mamá. Eso no significa que tu hijo quiera molestarte deliberadamente, sino que está desarrollando un mecanismo perfectamente normal y saludable para su relación contigo. 

Tantrum

4. El buen comportamiento requiere también mucha concentración

Comportarse bien es para los niños bastante agotador, ya que les requiere mucha fuerza para controlar sus impulsos y seguir las reglas que se les enseñan diariamente. En el momento en que regresan a casa con su madre, dejan salir todo lo que reprimieron y se acumuló a lo largo del día. Los ataques de ira son para los niños pequeños una forma de relajación y una estrategia para reducir el estrés. 

Not in the mood

5. Quieren manipular a su madre

Lo admitimos: este punto no es un cumplido. Pero es, de cualquier forma, una forma normal de desarrollo. En algunos casos, los niños utilizan sus ataques de ira como una estrategia de manipulación para conseguir lo que quieren. Sin embargo, hay diferencias entre un ataque de ira y una manipulación pura, ya que detrás de estas últimas se esconde siempre una razón lógica, mientras que las descargas emocionales no tienen por lo general una causa lógica reconocible. Si apoyas la estrategia manipulativa de tu hijo al darle lo que pide, lo único que lograrás es que recurra siempre a ella (ya que le dio buenos resultados). 

Tantrum

Puede sonar irónico, pero cuando nuestros hijos estallan de ira con nosotros, no significa que hayamos fallado como padres, sino justamente lo contrario: nuestros hijos se sienten seguros y se desarrollan en un ambiente en el cual pueden manifestarse libremente. Por eso, la próxima vez que te encuentres en esta posición, mírala desde el costado positivo: tu hijo sabe que tu amor es incondicional. 

Aquí te dejamos dos artículos con algunos trucos sobre crianza infantil:

 

Fuentes: brightside, netmoms

Imágenes en miniatura: ©flickr/linden sweeney ©flickr/Joe Saunders

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