"Daily Bread": fotos de lo que comen niños en el mundo en 1 semana

Uno es lo que come. ¿O no? ¿Hasta qué punto nuestra dieta nos refleja realmente como persona y nuestro trasfondo cultural? Para responder a esta pregunta, el estadounidense Gregg Segal fotografió a niños de todo el mundo y lo que comieron durante una semana.

En el transcurso de 3 años, Gregg fotografió a 60 niños de 9 países, 52 de los cuales incluyó en su libro Daily Bread: What Kids Eat Around the World ("Almuerzo: qué comen los niños de todo el mundo"). 

En 2016 Gregg comenzó a fotografiar a su hijo y sus amigos junto a sus almuerzos. Entre 2017 y 2018 viajó a India, Malasia, Alemania, Francia, Italia, Brasil, Senegal y Emiratos Árabes Unidos. 

pint0

Además de la barrera lingüística, el gran reto del proyecto también consistía en que los niños debían apuntar fielmente en un diario lo que comían durante 7 días, y el día de la sesión de fotos, los cocineros tenían que preparar todos los platos allí incluidos en el menor tiempo posible.

Pero Gregg podía confiar en que sus equipos locales se pondrían en contacto con los niños y les proporcionarían la comida. Sin embargo, Gregg tuvo que financiar la mayor parte del proyecto de su propio bolsillo.

Pese a todo, el esfuerzo sin duda ha merecido la pena. No solo las fotos son interesantes de por sí: también lo que estas cuentan. No solo son un retrato de los niños: además, nos dan una visión general de cómo se consumen los alimentos en el mundo. 

 
 
 
 
 
Sieh dir diesen Beitrag auf Instagram an
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Ein Beitrag geteilt von Gregg Segal (@greggsegal) am

1. Greta (7 años, Alemania)

Greta vive con su madre y hermana pequeña en Hamburgo. Cuando va a visitar a sus abuelos, le gusta recoger castañas que caen de los árboles. Su comida preferida son los palitos de pescado con puré de papas. 

Aunque su dieta incluye pan y algunas frutas, predominan los alimentos más contundentes como carne, papas fritas, pasta o dulces.

pint1

2. John (7 años, Alemania)

Los niños eligieron la ropa con la que salieron en las fotos, aunque se les pidió que fuera algo que normalmente llevaran o les interesara. A John le gusta el boxeo tailandés y desayunar en la cama. Por ello, se puso unos guantes de boxeo para la foto y se metió bajo el edredón de su cama. 

John vive con sus padres a las afueras de Hamburgo. En comparación con Greta, la cantidad es obviamente mayor y también incluye alimentos del supermercado. Su plato preferido es el asado que prepara su abuela. Bebe agua normalmente, aunque en los fines de semana se permite los refrescos.  

pint2

3. Kawakanih (9 años, Brasil)

El mayor contraste de las fotografías de Gregg lo ofrece Kawakanih, que es miembro de una tribu indígena habitante de un parque nacional en la cuenca del Amazonas. En consecuencia, su alimentación se compone de pescado, fruta, frutos secos y platos hechos con la mandioca que allí crece. 

Kawakanih es 1 de las 7 personas que hablan la lengua materna de su tribu. También habla el dialecto de su padre y portugués. Aunque su aldea no tiene ni electricidad ni agua corriente, cada pocos meses asiste a un curso de informática para el que tiene que viajar 31 horas.

Le gusta leer libros de historia (en especial, sobre el antiguo Egipto) y ayuda en el cultivo y preparación de la mandioca, además de en la pesca. Según cuenta, solo necesita 5 minutos para capturar un pescado. 

4. Henrico (10 años, Brasil)

De la selva brasileña a la gran ciudad: Henrico vive en un prestigioso barrio de las afueras de la capital, Brasilia. Su madre es productora en la industria del cine y la publicidad. A Henrico y sus dos hermanos los cuidan su abuela y la empleada doméstica.

Su plato favorito es la feijoada, un guiso brasileño de frijoles y cerdo servido con arroz. Los dulces favoritos de Henrico son el soufflé de chocolate, el chocolate Toblerone, todo a lo que se le ponga Nutella, el brigadeiro (especialidad brasileña, que consiste en una especie de praliné de trufa) y tostadas de mantequilla con chocolate en polvo.

Henrico es fan de Star Wars, le gusta ver Netflix, escuchar a Justin Bieber y Maroon 5, y ya se ha terminado los videojuegos de Little Big Planet, Lego Marvel y Escape 3.

pint4

5. Meissa (11 años, Senegal)

En un suburbio arenoso y sin árboles de Dakar Meissa comparte habitación con sus padres y hermano. Este lugar se creó en la década de 1970 como un nuevo espacio para la población pobre de la capital de Senegal.

La familia vive frente a un estadio de fútbol y a un gran mercado donde pueden comprarse alimentos frescos. Meissa no come mucho, y a menudo se prepara baguettes rellenas de pasta, guisantes o papas asadas. 

pint5

6. Frank (8 años, Senegal)

Frank vive con su hermano mayor y su padre, que es director de recursos humanos en un barrio noble de Dakar. Los padres de Frank están divorciados y su madre desafortunadamente tiene poco tiempo para su hijo debido a su trabajo. 

A Frank le gusta comer los frutos de los árboles en su terraza, además del pescado que prepara el cocinero contratado por la familia. Cuando no está viendo la televisión o jugando a la Play Station, a Frank le encanta bailar. 

pint6

7. Siti (9 años, Malasia)

Siti, sus padres y sus cuatro hermanos viven en un suburbio de Kuala Lumpur, la capital de Malasia. Su padre es vendedor de autos; su madre, ama de casa. Esta cocina para la familia y pone las reglas a la hora de la comida. Una oración antes de cenar, solo se bebe una vez que se comienza a comer y no está permitido hablar. De hecho, es raro que todos coman juntos porque están demasiado ocupados.

Siti asiste a una escuela china donde aprende mandarín. Siti practica taekwando y le gustaría tener un iPad. Su plato favorito son los espaguetis a la carbonara.

Los pequeños recipientes que tiene bajo los pies están rellenos de agua embotellada. Estos los vende en vasos.

pint7

8. Anchal (10 años, India)

Anchal vive con sus padres y dos hermanos en una fundición de aluminio de 2,4 x 2,4 metros situada en una obra de la construcción en un suburbio de Mumbai.

A Anchal le encantaría vivir en la granja donde nació, donde podría ir a la escuela y luego ejercer de maestra. En cambio, está ocupada ayudando con la casa y cuidando a su hermanito.

Aunque el padre de Anchal solo gana unos 4,50 euros al día, a su madre le basta para preparar platos como curry de coliflor o lentejas. Dado que la familia no puede permitirse el lujo de comer comida chatarra, come más sano que muchas familias más ricas.

pint8

9. Isaiah (16 años, EE. UU.)

Isaiah vive con su madre en el pueblo costero californiano de Long Beach. Isaiah toca la batería y la flauta, y toma clases de actuación. Uno de sus modelos a seguir es Eddie Murphy.

Su comida preferida es pollo a la naranja con arroz frito. Su madre no le permite beber refrescos, pero después de la sesión de fotos Isaiah decidió por cuenta propia renunciar en el futuro a los snacks.

pint9

10.  Jesús (edad sin especificar, EE. UU.)

La madre de Jesús llegó a Los Ángeles desde México cuando era adolescente. Jesús vive con ella y sus dos hermanas mayores en un apartamento de una habitación infestado de cucarachas y ratas. Sobre su padre solo sabe que tiene una nueva familia en algún otro lugar.

Jesús no tiene tiempo para desayunar porque tarda una hora en llegar a la universidad. La comida de la universidad no se le antoja apetitosa, por lo que se conforma con algo de fruta durante todo el día. La única comida caliente del día es la cena, que prepara su madre.

Jesús participa en asociaciones de ayuda a personas sin hogar y contra la violencia doméstica. Actualmente estudia Matemáticas y Psicología en Harvard.

pint20

"Me concentré en los niños porque los hábitos alimenticios se desarrollan a una edad temprana. Y si llevas una dieta equivocada a los 9 o 10 años, se hace difícil cambiarlo con la edad," explica Gregg. Por otro lado, el proyecto "Daily Bread" le enseñó dos cosas, explica.

La primera es que la comida barata y rápida para solteros conforma una dieta poco saludable. En comparación, las familias pobres como la de Anchal tienen una ventaja, porque simplemente no pueden pagar la comida chatarra.

Por otro lado, los menús infantiles son cada vez más similares en todo el mundo, aunque sus personalidades y antecedentes culturales sean muy diferentes. "Viven en continentes muy distantes, pero es como si sus padres estuvieran comprando en el mismo supermercado global", señala Gregg.

Créditos:

boredpanda

Comentarios

Más de Nolocreo