‘Looks’ para tu cuello: 12 formas distintas de ponerte el chal o la bufanda

Ya es otoño, las temperaturas bajan poco a poco y nos invitan a sacar las bufandas y los chales del armario. Tal vez eres de los que solo se ponen el chal para protegerse del frío, pero aquí te vamos a presentar doce formas de anudártelo para que se vea con más estilo.

1. El infinito

Esta variante consiste en unir las puntas con un nudo suelto y darle dos vueltas al chal alrededor del cuello, de manera que no se vean las puntas.  

2. El nudo básico

Sencillo pero elegante: este nudo funciona mejor con un chal muy fino, hace las veces de un collar, pero claro, este además te proporciona calor. 

3. La estola

Las estolas resultan muy convenientes para protegerse del frío en los brazos. A veces, una bufanda puede reemplazar una chaqueta ligera. 

4. El nudo europeo

Para la variante europea, solo necesitas doblar el chal a la mitad y pasar las puntas por el hueco que queda en medio del chal. Perfecto para el día a día. 

5. La boa

La boa es ideal para cuando olvidas el collar y no quieres renunciar a los accesorios. 

6. La cascada

Esta técnica cubre el escote e imprime un toque muy estético a tu "look", sobre todo si quieres ponerle un poco de color a un atuendo obscuro. 

7. La X

Si quieres que los dos extremos de la bufanda cuelguen un poquito enfrente, haz este truco. 

8. El truco mágico

No solo es uno de los más sencillos, también de los más bonitos. Se trata de crear la impresión de un bucle doble en la parte del cuello. 

9. El nudo clave

Este nudo es genial para los fanáticos de las bufandas cortas, esos que odian que las puntas les cuelguen hasta la cintura.  

10. El nudo falso

Este truco requiere la ayuda de tu mano para envolver uno de los extremos del chal. Ya verás que este nudo falso se convertirá en uno de tus compañeros favoritos. 

11. La trenza

No te preocupes, no tienes que trenzar nada, lo que pasa es que el lugar donde se une la bufanda tiene esta forma, aunque pensándolo bien, también parece una especie de corbata.

12. Las orejas de conejo

Cuando veas los resultados, comprenderás mejor el nombre de este nudo: después de hacerlo, los extremos, o sea, las orejas de conejo, quedarán de distintos largos, lo que le da un toque de fantasía a este simpático nudo. 

A partir de ahora, puedes probar un nuevo estilo cada día. Y en caso de que quieras sacar la diseñadora que llevas dentro, puedes inventar o reinventar más nudos. Recuerda, es un accesorio muy visible.