Un truco muy sencillo para destrabar la válvula de tus radiadores

La situación debería resultarnos conocida: afuera comienza a hacer frío, nos acercamos al radiador, lo encendemos, y éste permanece impávido, frío como si no hubiese pasado nada. Lo primero que pensamos es que el sistema de calefacción tiene aire y necesitamos sacárselo. Es muy probable, sin embargo, que la causa radique en otro problema. ¿La buena noticia? Esta reparación es muy sencilla y sólo lleva unos pocos minutos.

Antes de llamar a un experto que seguramente cobrará fortunas, si no enciende la calefacción prueba primero que la válvula no esté atascada (un problema muy frecuente sobre todo a comienzos del invierno). Solucionar esto te será muy sencillo. 

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Primero, gira la perilla del radiador hasta el punto más caliente. Luego, con una llave sueca o de tubo, desatornilla el cabezal del termostato. Para eso tienes que aflojar y retirar la arandela. No te preocupes, en este paso no puede ocurrir nada ni te verás sorprendido por un repentino chorro de agua. 

Ahora, con el cabezal del termostato en la mano, verás que de la válvula termostática asoma una pequeña espiga de metal conocida como "pasador". El pasador sobresale unos milímetros de la válvula y normalmente tiene que poder moverse. Intenta moverlo hacia dentro y hacia fuera con los dedos o con ayuda de la llave de tubo. Si el pasador se queda rígido y no lo puedes mover, entonces significa que la válvula está atascada. 

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¿Qué puedes hacer? Con cuidado (!) golpea con un martillo o con tu llave sueca sobre el pasador. Con un poco de suerte, éste se soltará. Si no es el caso, necesitas algunos materiales extra. 

Procura lubricar la válvula. Para esto, puedes recurrir a un lubricante como el WD-40. Rocía el pasador con este producto y vuelve a golpearlo cuidadosamente hasta que se suelte. Puedes mover el pasador hacia dentro y hacia afuera para controlar que efectivamente esté flexible. Si lo puedes mover sin resistencia, lo has logrado. Ahora verás cómo la calefacción comienza a tomar la temperatura deseada. 

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Para finalizar, coloca nuevamente el cabezal del termostato y atorníllalo bien. Parece mentira, pero así de fácil es solucionar este problema.

¿Quieres darle una buena limpieza a esos acumuladores seriales de polvo? En este artículo te dejamos una guía completa para la limpieza paso a paso de los radiadores

Fuente: heizung

Imágenes en miniatura: @Media Partisans

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