9 trucos para los zapatos que aún no conoces
Demasiado apretados, angostos o peligrosamente resbaladizos: los zapatos pueden causar muchos problemas. Pero con nuestros sencillos trucos, puedes poner fin a todos estos inconvenientes y moverte con pies ligeros por el día a día: aquí tienes 9 trucos con zapatos que cambiarán tu vida.
1. Zapatos resbaladizos
¿Te deslizas sin querer con tus zapatos? ¡Eso es muy peligroso! Simplemente grapa las suelas de tus zapatos para darles más agarre y sujeción en superficies resbaladizas.
2. Pies sudorosos
Si usas ciertos zapatos con los pies descalzos, es muy probable que después de un rato te suden los pies y empieces a sentir molestias. Sin embargo, si rocías el interior de tus zapatos con champú seco antes de ponértelos, evitarás los pies mojados.
3. Tacones rotos
Los tacones suelen salir de las escaleras eléctricas llenos de arañazos, sobre todo si son tacones altos, incluso pueden llegar a romperse completamente. La mayoría de las veces puedes reparar tus tacones agregándoles ese toque de distinción. Solo tienes que cubrirlos por completo con pegamento para manualidades y espolvorearlos con purpurina, ¡y tus zapatos volverán a parecer nuevos!
4. Zapatos demasiado angostos
Los zapatos te aprietan un poco, ¿pero te gustan tanto que no quieres renunciar a ellos? No te preocupes, basta con llenar dos bolsas sellables con agua, cerrarlas y meterlas en los zapatos y meterlos en el congelador durante toda la noche. La lenta expansión del agua durante la congelación dilata suavemente tus zapatos.
5. Dedos que resbalan hacia adelante
En los zapatos altos y abiertos de verano, los dedos del pie suelen deslizarse sobre el borde delantero. Esto, además de incómodo, conlleva un cierto riesgo de lesión. Solo tienes que pegar dos tiritas para heridas en la parte trasera de la plantilla para que tus pies se agarren mejor y no parezca que tus pies son demasiado grandes para los zapatos.
6. Suelas resbaladizas
Los zapatos de tacón añaden un toque chic a cualquier atuendo. Pero toda mujer que haya llevado alguna vez un calzado tan alto sabe lo resbaladizo que puede ser, especialmente en superficies muy lisas como las baldosas o el parqué. Para poder lucir unos tacones altos sin resbalar, solo hay que raspar la suela con un poco de papel de lija, y los zapatos chic tendrán un mejor agarre.
7. Dolor en los pies por usar tacones
Por muy bien que se vean los tacones, pueden ser una auténtica tortura para los pies. Esto no significa necesariamente que aprieten o rocen, sino que los dedos y los pies se acalambran y duelen cuando se usan durante mucho tiempo. Sin embargo, si unes el dedo medio y el anular con tela adhesiva, el pie tiene más estabilidad y un poco más de espacio en el zapato. De este modo, se mantiene relajado y a salvo de dolores por más tiempo.
8. Limpiar calzado deportivo blanco
Hay que reconocer que los zapatos deportivos blancos son totalmente elegantes, pero solo cuando mantienen su color. Si tu par de tenis está sucio o incluso ha adquirido un tono ligeramente amarillento, solo tienes que mezclar un poco de bicarbonato de sodio con detergente para lavavajillas y limpiarlos: ¡después brillarán como nuevos!
9. Reparar el forro
El deslizamiento constante del pie dentro del zapato lo somete a tensión, de modo que el forro acaba por romperse debido al uso constante. En tal caso, es bueno tener a mano un par de jeans viejos. Corta un trozo de los vaqueros. La tela de uno de los bolsillos delanteros es mejor para esto, ya que no es tan dura. Cose la pieza a la parte superior del talón del zapato. Después podrás ponerte y quitarte fácilmente los zapatos sin dañar más el forro.
Tacones altos que resbalan, pies doloridos o zapatos demasiado apretados: con estos ingeniosos tips, los problemas más molestos relacionados con los zapatos son ya cosa del pasado.
Aquí encontrarás más consejos interesantes sobre el tema del calzado: