Las graves consecuencias de beber alcohol durante el embarazo y la lactancia

No es ningún secreto que el alcohol es perjudicial para los niños. A nadie se le ocurriría llenar el biberón de un bebé con alcohol u ofrecerle a un niño un vaso de vino en una cena. Sin embargo, muchas personas piensan que, mientras que el bebé esté dentro del cuerpo materno, el alcohol es inofensivo. En Alemania, por ejemplo, alrededor de un 20 por ciento de las mujeres beben alcohol durante el embarazo; en Gran Bretaña la cifra sube a un 41 por ciento y en Irlanda alcanza un 60 por ciento. 

En este artículo te contamos acerca de las posibles consecuencias del consumo de alcohol durante el embarazo. 

Cuando una mujer embarazada bebe alcohol, este pasa a través de la placenta directamente a la sangre del nonato, alcanzando la misma concentración que en la madre. Debido a que el hígado del bebé todavía no está enteramente desarrollado, el cuerpo no puede descomponer correctamente el alcohol. De esta forma, el alcohol permanece en el cuerpo de un nonato hasta 10 veces más tiempo que en el de la madre. 

El alcohol afecta en los niños sobre todo la división celular. Como consecuencia, puede ocurrir la mala formación o el mal funcionamiento de sus órganos. Esto es especialmente peligroso para el cerebro.  

Alison with a wine glass and tummy

¿Qué cantidades de alcohol son dañinas durante el embarazo?

No existe una cifra exacta de cuánto alcohol es peligroso durante el embarazo o cuánto es inofensivo. Ya pequeñas cantidades pueden afectar el desarrollo del bebé en el útero. Por eso, los médicos recomiendan no consumir alcohol durante el embarazo y así evitar riesgos innecesarios. Eso también aplica para el período de lactancia, ya que el alcohol pasa prácticamente sin filtro a través de la leche materna. 

Principio "todo o nada"

Muchas veces escuchamos hablar del principio "todo o nada". Este principio afirma que el consumo de alcohol hasta la quinta semana de embarazo producirá un aborto espontáneo o, en el caso de que no suceda, que el cuerpo del niño podrá reparar los daños producidos sin que queden secuelas. Sin embargo, investigadores afirman que el alcohol ya es dañino a partir de la tercera semana de embarazo, es decir, cuando muchas mujeres aún no saben que están embarazadas. Por eso, si estás intentando quedar embarazada, lo mejor es dejar completamente el alcohol. 

Pregnant Silhouette

Consecuencias del consumo de alcohol durante el embarazo

Los daños del alcohol durante el embarazo se conocen como trastorno del espectro alcohólico fetal (TEAF). El extremo más grave de este trastorno se conoce como síndrome alcohólico fetal (SAF). Las consecuencias de este síndrome son físicamente visibles:

  • En el rostro: labio superior delgado, apertura de los párpados más pequeña de lo normal, pequeñas arrugas en la nariz y boca.
  • Los niños afectados son más pequeños y tienen bajo peso.
  • El cráneo y el cerebro son más pequeños. 

©Getty Images

Daños mentales y físicos en niños

El consumo de alcohol durante el embarazo puede producir una cantidad amplia de daños en el niño. Entre las consecuencias físicas se encuentran la malformación de órganos, daños cerebrales, fallas en el corazón y problemas de motricidad. Las consecuencias de comportamiento pueden ser irritabilidad, desasosiego y problemas de concentración. Debido a la usual falta de concentración que sufren los niños, muchas veces son diagnosticados con trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH). 

Otras posibles consecuencias

  • Problemas de habla
  • Problemas de memoria
  • Problemas de orientación
  • Impulsividad
  • Dificultad para entender la lógica de causa-consecuencia.
  • Dificultades para realizar planes. 

Fussy

¿Cómo es la rutina con niños con TEAF?

Los niños con daños producidos por el alcohol tendrán, a causa de las dificultades para hablar y para concentrarse, problemas en la escuela. Además, los problemas de orientación y motrices pueden hacer que les resulte difícil andar en bicicleta o esquivar objetos peligrosos. 

La falta de control sobre sus impulsos hará que sean rápidamente agresivos y que entren constantemente en conflictos con otros niños, lo que afectará en última instancia su vida social. Como no pueden entender del todo la lógica causa-efecto, pueden ser propensos a ser utilizados por otras personas, explotados sexualmente o incentivados a delinquir. 

Las dificultades para realizar planes hacen que los niños con TEAF no tengan motivación ni objetivos. Además, aunque logren tener objetivos, les resultará difícil imaginar cómo alcanzarlos y cómo lidiar con los problemas que surjan. Eso puede dificultar su paso por la escuela, pero sobre todo será un gran problema cuando crezcan y deban afrontar las labores profesionales. 

 

©Getty Images

Lo peor de esas consecuencias físicas es que, en la mayoría de los casos, no pueden ser curadas a través de procedimientos médicos. Por eso, dos tercios de las personas adultas no pueden vivir de manera independiente. Ese motivo debería ser suficiente para, por lo menos durante el embarazo y el periodo de lactancia, renunciar completamente al consumo de alcohol.  

Si crees que tu consumo de alcohol puede estar siendo problemático, en este artículo te dejamos 9 señales para controlar tu consumo

Fuentes: apotheken-umschauquarks, apotheken-umschau

Imágenes en miniatura: ©Flickr/Brett L. ©Getty Images

Comentarios

Más de Nolocreo